miércoles, 28 de octubre de 2009

EL poder sutir el abuso de autoridad

Este estudio nos ayudará a abrir los ojos y observar lo que dice la Biblia con respecto a la sujeción a las autoridades y entonces jamás ser las victimas del abuso de poder y tampoco ser los victimarios.
Con este estudio no se pretende “atacar” en absoluto al liderazgo de la iglesia, ni al líder en particular ni a ningún pastor genuinamente llamado, sino solo mostrar enfáticamente un fenómeno que ya esta implantado dentro de nuestras iglesias y que está hiriendo a muchos mas de lo que Ud. se imagina.
Se Ha podido observar vez tras vez que hay abuso espiritual, cuando se emplea la espiritualidad para hacer que otras personas vivan según cierta “norma espiritual” conforme a los parámetros de los abusadores.
Cualquiera sea el abuso espiritual o de autoridad, los resultados suelen ser los mismos: La persona queda con el peso de la culpa del juicio o la condena, y aun la vergüenza y queda confusa respecto a la posición como cristiano.
Cuando un pastor le dice a su congregación que aquellos que dejan su iglesia o le desobedecen su autoridad están en peligro de la furia de Dios, usted puede estar seguro que en este hombre está operando un espíritu de control. El está intentando sembrar temor como medio carnal de mantener a las personas dentro de su iglesia. ¡Cuidado! comienza a verse algunas señales.
Definición de Abuso de autoridad = Extralimitación de funciones por parte de las autoridades o funcionarios públicos en el desempeño de un determinado cargo u oficio. (R.A.E.)
El abuso espiritual consiste, en maltratar a una persona que necesita ayuda, apoyo o mayor crecimiento espiritual, lo cual debilita, sabotea o disminuye el desarrollo espiritual de esa persona, para poder manipular los sentimientos. (David Johnson)
I. El Síndrome de “Diotrefismo”. Vemos un ejemplo bíblico de esto en 3ra. Juan 9-10. Elitismo espiritual no es algo nuevo en la iglesia, pero el apóstol Pablo le llama correctamente “malvado”.
El abuso espiritual mayormente ocurre cuando un líder usa su posición espiritual para controlar o dominar a los demás (a sabiendas o no); cuando las opiniones de los demás son ignoradas o pasadas por alto, atropellando así los sentimientos de otras personas. Algunos líderes religiosos, inseguros de sí mismos, abusan del poder que tienen para reforzar su posición. El uso del poder en esta manera es lo que llamamos abuso espiritual, ya que no se considera el bienestar de vida, emociones y sentimientos de los demás en la congregación.
Lamentablemente esto ocurre con mucha frecuencia en el pueblo de Dios. Una vez más, no todo el tiempo es intencional, pero sucede.
Otra forma en que se manifiesta el abuso espiritual es cuando se emplea la espiritualidad para obligar a las personas a que vivan según cierto “criterio” o “norma” espiritual, que muchas veces muy poco o nada tiene que ver con la vida espiritual de la persona. Por ejemplo: “Si quieres estar bien con Dios tienes que hacer esto o aquello…”
Cuando estos líderes encuentran cierta resistencia a sus demandas, comienzan a emplear este tipo de espiritualidad, y lo que realmente están haciendo es atropellar a los demás con sus actitudes y palabras.
II. El Hedonismo, el placebo, la droga del placer. Observemos el pasaje de Jeremías 5:26; 30-31. Notemos claramente que siempre el maltrato proviene de una “posición de autoridad espiritual o religiosa” o sea se puede ser abusado por alguien que no tiene verdadera autoridad espiritual pero quiere ser percibido como quien tiene poder y autoridad y asi tener el lugar de influencia.
La idea es siempre tener entretenidas a las personas, Jeremías 6:13-14, para que ignore las necesidades reales, y así se les puede dar los “placebos” en forma de respuestas rápidas y fáciles. (formulas para prosperar, confesar, etc.)
III. “Jerarquicismo Góspel” Obediencia, Sometimiento, Sujeción (Yo soy el manda Más, entendido)
En los sistemas abusivos, los líderes estarán preocupados acerca de lo que la gente hace, bajo una fórmula que se lee: “lo que haces = lo que mereces”. Cuando los líderes preguntan al miembro qué hace, en qué trabaja, cómo gasta su tiempo, no es porque quieren considerarlos y tratar de ayudarlos, sino para decirles frases como: “No trabaje tanto, Dios va a proveerle si sirve a la iglesia (y a la casa del pastor) más de lo que sirve a su trabajo secular”.
Comienza entonces un “estira-y-afloja” con el propósito de convencer a la oveja a que dedique tiempo a “servir en el ministerio”. Si esto no funciona por las buenas se echa mano del concepto de obediencia, sumisión, sujeción, con el apoyo que emana del punto No. 1: “Tienes que obedecer al varón que Dios nos puso como líder en todo lo que él te diga, sin preguntar.” Esta idea de obediencia, cuando no es bajo el concepto bíblico, se ejerce de forma humillante, deshonesta y con un sentido de explotación a la “oveja”, que muchas veces llega a la ignominia (afrenta pública).
El sistema abusivo ha perdido, bajo el sistema piramidal, el verdadero concepto de la obediencia. Los pasajes en los que se basa este tipo de control a la obediencia se hallan en Romanos 13:1; 1 Pedro 5:5 y Hebreos 13:17. Sin duda que son de suma importancia y hay que ponerlos en práctica en nuestra vida cristiana, sólo que los líderes abusivos los leen mal y sin el equilibrio debido. Por ejemplo, muy rara vez los líderes mencionan Hechos 5:29, o Jeremias 17:5 
Por otro lado, pocos o ninguno de ellos dedica el tiempo suficiente para analizar lo que en la Biblia quiere decir la palabra “obedecer”. Por ejemplo cuando leen en Hebreos 13:17, creen que ya la hicieron sólo porque así lo dice la Escritura.
Pero veamos más claramente a la luz del significado real de las palabras obedecer y sujetar. De acuerdo a la Greek-Hebrew Key Word Study Bible, la palabra usada es un verbo que significa: convencer (peithesthe); por analogía, pacificar o reconciliar; también significa confiar en, fiarse de, acuerdo, seguridad, confianza. Finalmente: ser persuadido.
Estos abusadores están empeñados en ser igual a Dios y no captan el concepto de obediencia
Como se ve, en ningún momento “obedecer” quiere decir que alguien da una orden y el otro la acata sin pensar, sin preguntar, sin analizarla o juzgar si esa orden es correcta desde el punto de vista bíblico. Eso a los líderes no les interesa; una de las frases más usadas por los sistemas abusivos es aquella que dice: “el pastor dice que esto es una orden, así es que obedezcan y punto”.
La otra frase que usan los abusivos es “someter/sujetar”. Los autoritarios creen que esto equivale a que la “oveja” tiene que agachar la cabeza y hacer todo lo que se le mande, pues está bajo una cadena de mando que viene desde Dios, pasa por el pastor y termina con un ujier o cosa semejante y termina con “los hermanitos”. La palabra someter y aparece en griego siete veces en el Nuevo Testamento; dos se refieren a la sujeción de la esposa al marido, una a Dios, una a las autoridades del mundo, y tres a los líderes. Al examinar estas últimas citas nos damos cuenta que poseen dos partes y no sólo una como algunos líderes abusivos las quieren hacer pasar; es decir, los abusivos toman la parte que les conviene, y desechan la otra.
La primera cita se halla en 1 Corintios 16:16. Pero ¿a quién hay que sujetarse así? ¿Quiénes son ellos?. Los versículos anteriores son los que se comen los abusivos, 1 Corintios 16:14-15. Estos son dos requisitos, condiciones o señales que indican a quién debe darse obediencia en las cosas de Dios. No podemos estar obedeciendo ciegamente a quienes se dedican a utilizar a otros para llenar sus expectativas financieras y personales. Ahora, el final del verso 16 (que también se comen los abusivos), dice: “así también [sujétense] a los que ayudan y trabajan”. Un signo casi equívoco de los abusivos es que, dada su tremenda “autoridad” sobre otros, dedican la mayor parte de su tiempo a “No Hacer Nada” (eso sí, con mucha discreción)
La otra cita es Hebreos 13:17. La segunda parte del verso habla de una razón por la cual me debo sujetar a mi líder: “porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría” [no groseramente ni con autoritarismo].
La tercera cita es de 1 Pedro 5:5 y va dirigida a los jóvenes. Esta cita es usada muy a menudo para reprender a éstos e irles enseñando el camino de la “obediencia” irreflexiva. De lo que nunca se habla es que estos líderes, ancianos, pastores, deben mostrar integridad para que sean objeto de respeto y sujeción por parte de los jóvenes. Los versos 3 y 4 hablan de que los ancianos “deben cuidar la grey, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancias deshonestas, sino con ánimo pronto; No Como Teniendo Señorio de los que están a vuestro cuidado, sino Siendo Ejemplo de la grey”.
IV. Autoritarismo, o declaración de lealtad. “Nosotros solo tenemos la verdad” esto se proyecta en todo sistema de abuso espiritual, y quien no entienda y acepte esta “visión” no estará a salvo , tienen que quedarse en el sistema, así no serán considerados “rebeldes y descarriados”.
a. Buenas tácticas para asustar – podría llamar de “paranoia espiritualizada” “debemos apartarnos de aquellos que no comparten el sistema nuestro para no ser perjudicado” si te apartas de nosotros Dios te quitara tu bendición, “quedarás expuesto al mismo Satanás” etc., etc.
b. Buenas tácticas para humillar – esto se hace avergonzando en publico, y provoca una actitud de no querer ser expuesto o también de perder algún puesto en la iglesia.
c. Soy el pastor y hay que hacerlo… Cuidado.
d. Nadie cuestione mi autoridad…
e. La autoridad se desprende de la Verdad – Tomemos como ejemplo a Moisés, que claramente demostró la autoridad como alguien que había llegado a conocer a Dios, la autoridad no era suya, la autoridad procedía de que el decía al pueblo, en forma veraz y clara, Exactamente lo que Dios le decía a el. Que significa todo esto que la autoridad residía en la verdad y no en Moisés.
V. La gran salida – Renovar la mente.- Romanos 12:1-2. 
a. Disfrutar de la libertad. Galatas 5:1; 7-8. 
b. Recibiendo la abundancia. Romanos 5:17. 
c. Recuperando la credibilidad. (Ud. Puede tener problemas para confiar) el gato que se sienta sobre la tapa de una estufa encendida nunca más volverá a sentarse sobre ella, pero probablemente, tampoco se sentara sobre la tapa de una estufa apagada.
Tal vez muchos tendrán dificultades para volver a confiar en un sistema espiritual, y tal vez cueste el elemento sujeción, pero es Dios que hace la obra en nosotros. Hechos 4:23,29-30

jueves, 22 de octubre de 2009

Formado Para Servirle a Dios


Dios te diseñó para que hicieras una diferencia con tu vida. Fuiste creado para añadir vida a la tierra, no para quitársela. Dios quiere que le des algo a cambio.
Creado para servir a Dios.

La Biblia dice: “Dios nos creó para una vida de buenas obras, las cuales ha preparado para nosotros”. Esas “buenas obras” son tu servicio. Siempre que sirves a otros de cualquier manera, verdaderamente estás sirviendo a Dios y cumpliendo uno de tus propósitos.
Lo que Dios le dijo a Jeremías también es válido para ti:”Antes de formarte en el vientre, ya te había elegido, antes que nacieras, ya te había apartado”. Fuiste puesto en este planeta para cumplir una asignación especial.

Salvado para servir a Dios
La Biblia afirma “Él es quien nos salvó y escogió para su obra santa, no porque lo merecíamos sino porque estaba en su plan”.
Dios te redimió para que hicieras su “obra santa”. Tú no eres salvo por buenas obras, sino para hacer buenas obras. En el reino de Dios, tienes un lugar, un propósito, un rol y una función a cumplir. Esto le da a tu vida un gran significado y valor. Costó la propia vida de Jesús comprar tu salvación.

Llamado para servir a Dios
A medida que crecías, pudiste haber pensado que ser “llamado” por Dios era algo para misioneros, pastores, y otros trabajadores de “tiempo completo”; pero la Biblia dice que cada cristiano es llamado a servir. Tu llamado a la salvación incluye el llamamiento a servir.
La Biblia dice: “Él nos salvó y nos llamó a ser su pueblo, no por lo que hemos hecho sino según su propósito”. Pedro añade:”Fueron escogidos para hablar de las excelentes cualidades de Dios, quien los llamó”. En el momento que usas las habilidades que Dios te dio para ayudar a otros, estás cumpliendo con tu llamado. La Biblia afirma: “Ahora perteneces a Él... de manera que puedas ser usado para el servicio de Dios”.
¿Cuánto de tu tiempo estás usando en servir a Dios? En algunas iglesias de China, a los nuevos creyentes les dan la bienvenida diciendo: “Jesús ahora tiene un nuevo par de ojos para ver, nuevos oídos para escuchar, nuevas manos para ayudar y un nuevo corazón para amar a otros”.
Una de las razones por las que necesitas integrarte a la familia de la iglesia es para cumplir de forma práctica con tu llamado a servir a otros creyentes.
Se te manda servir a Dios
Jesús fue claro: “Tu actitud debe ser igual a la mía, porque yo, el Mesías, no vine a ser servido sino a servir y a dar mi vida”. Para los cristianos, el servicio no es opcional, sino algo que debe estar arraigado en nuestros horarios . Es el corazón de la vida cristiana. Jesús vino “a servir” y “a dar”, y esos dos verbos también pueden definir tu vida en la tierra. Servir y dar, en resumen, es un propósito de Dios para tu vida.
Jesús enseñó que la madurez espiritual nunca es un fin en si mismo. ¡La madurez es para ministrar! No es suficiente seguir aprendiendo más y más. Debemos poner en acción lo que conocemos y poner en práctica lo que proclamamos creer.

Servicio y significado
Vas a dar tu vida por algo. ¿Será por una carrera profesional, por un deporte, un entretenimiento, fama, riquezas? Nada de eso tiene importancia duradera. El servicio es el camino a la significación real. Es a través del ministerio que descubrimos el significado de nuestras vidas.
La Biblia afirma: “Cada uno de nosotros encuentra su función y significado como parte de su cuerpo”.
Dios quiere usarte para marcar una diferencia en su mundo. Él quiere trabajar a través de ti. No importa la duración de tu vida sino la donación de la misma. No cuánto tiempo viviste, sino cómo lo hiciste.

Si no estás involucrado en ningún servicio o ministerio ¿qué excusa has estado usando? Abraham era viejo, Jacob inseguro, Lea sin atractivo, José fue abusado, Moisés tartamudeaba, Gedeón era pobre, Sansón codependiente, Rahab una inmoral, David tuvo una amante, Jeremías estaba deprimido, Jonás era rebelde, Noemí una viuda, Juan el Bautista un excéntrico, Pedro impulsivo, Marta preocupada, la samaritana fracasada en varios matrimonios, Zacarías era impopular, Tomás tuvo dudas, Pablo tuvo una salud pobre, y Timoteo era tímido. Esta es efectivamente una variedad de individuos que no se adaptan muy bien al ambiente, pero Dios los usó a cada uno de ellos para su servicio. También te usará a ti, si dejas de dar excusas.

“Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica”.
Efesios 2:10 (NVI)

miércoles, 21 de octubre de 2009

Alex Campos Presenta Primicia de “Te Puedo Sentir”

En el marco de una carrera musical y ministerial de más de una década al interior del circuito musical contemporáneo cristiano, que se reflejan en siete producciones musicales, dos DVD’s que corresponden a sus placas “Al Taller del Maestro” (2002) y “Acústico: El Sonido del Silencio” (2006), la entrega de su testimonio en el Videolibro “Del Llanto a la Sonrisa”, la nominación al Grammy Latino 2008 por su álbum “Cuidaré de Ti” y seis premios Arpa en su haber; Álex Campos presenta al mundo entero su nuevo disco titulado “Te Puedo Sentir”.
En el año 1999 conocimos en la Capital de la República de Colombia, a un joven que soñaba con ganar a toda su generación para Cristo, por tal razón, decide responder al llamado que Dios le hizo de ser punta de lanza y junto a su banda llamada Misión Vida en aquel entonces, decide hacer cosas nuevas para su país a través de la música

.http://www.noticiacristiana.com/musica-cristiana/2009/10/alex-campos-presenta-primicia-de-te-puedo-sentir.html  

Aprendiendo sobre el liderazgo cristiano‏

El liderazgo se basa en el carácter, no en los tipos de personalidad. Algunos individuos introvertidos pueden llegar a ser líderes efectivos, sin embargo algunos extrovertidos pueden en ocasiones ser una molestia.  La Biblia reconoce una filosofía de liderazgo cristiano, la enseñada y modelada por Cristo mismo.
La Palabra es suficiente para dar entrenamiento de liderazgo cristiano efectivo.
1 Timoteo 3:16. El liderazgo cristiano es antijerárquico. Esto significa que operamos bajo el concepto de respeto mutuo e igualdad.

Jesús dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber?
Los discípulos no sabían que el llamado al liderazgo cristiano es, en realidad, un llamado al sufrimiento.
Dios en su soberanía arregla las cosas de manera que los honores o títulos que acompañan al liderazgo cristiano no se igualen a las presiones que el líder tiene que soportar. Los que valoran los títulos más que el honor de servirle al pueblo de Dios se decepcionarán. Tengan mucho cuidado con sus motivaciones. Un puesto de liderazgo trae consigo cierto estatus y honor. Muchos son atraídos a esos oficios por tales motivos, pero llegan a ser líderes descuidados y mayormente dictatoriales. Se hacen daño a sí mismos y a la congregación. Hay tiempo en que el hombre se enseñorea del hombre para mal suyo (Ec 8:9).
Todos los líderes espirituales son iguales en autoridad. No existen jerarquías en el gobierno bíblico reformado. Aun cuando el personal ordenado tenga autoridad eclesiástica, el concepto de la hermandad entre creyentes es más efectivo en el liderazgo que la jerarquía autoritaria.
Aquí el maestro puede explicar la prohibición absoluta de Jesús en cuanto al autoritarismo y al gobierno jerárquico. Los dos discípulos se imaginaban que el Reino de Dios era una jerarquía como la de los reinos terrenales, y querían asegurarse un buen rango. La búsqueda de puestos de honor es reprendida por Jesús. Lo lícito es servir.
El liderazgo es un llamado divino, y los puestos son dados por el Padre, no por nombramientos humanos o por politizar.
El llamado al liderazgo cristiano es al sufrimiento. Este sufrimiento toma a menudo la forma de presiones psicológicas que otros creyentes no soportarían ni entenderían. ¿Cuáles son algunas de esas presiones?   Muchas veces la gente tiene expectativas demasiado elevadas que el líder no puede alcanzar. En ciertos casos, buscan que el pastor satisfaga sus necesidades, en vez de buscar a Cristo. ¿Cuál es el resultado de poner expectativas irrealistas en los hombros de los líderes?   Otras personas no tienen una actitud sujeta a la autoridad y solo se someten al ministerio del líder cuando es absolutamente necesario.
En ocasiones, el líder debe sostener principios piadosos que los demás no entienden ni comparten. A menudo, los líderes deben aplicar disciplina bíblica, aun cuando sea impopular y malentendido y tuvo que sufrir en silencio.   Dios, en su sabiduría, sabe cómo arreglar las circunstancias para que los títulos honoríficos que acompañan al cargo resulten ser compensación insuficiente para tanto sufrimiento y estrés. Aquellos que valoran los títulos y los honores, más que el servicio al pueblo de Dios, se sentirán muy pronto decepcionados.

¿Has sufrido abuso, persecución en tu congregación?

Sucede muy a menudo en la gran mayoría de congregaciones cristianas.
Puede ser varios los motivos, pero si esta se presenta por no sujetarte a los preceptos, doctrinas, tradiciones que hay se enseñan, hay que ver porqué no las aceptas o crees.
Es muy común que la gente asista a sus reuniones, participe en ellas aunque sea solo con su presencia, escuche el mensaje del predicador en turno y se vaya a su casa creyendo fielmente lo que se predicó.

Cuando te atreves a comprobar por ti mismo en la Biblia lo que te enseñaron bajo la guía del Espíritu Santo, te encontrarás que muchas enseñanzas no encajan con otras escrituras, o sea no ves congruencia, vas con la duda a preguntar a tus líderes espirituales de la Iglesia donde asistes, y muchos (no todos) no tendrán paciencia para explicarte las cosas, se molestarán por poner en duda sus interpretaciones bíblicas: dicen cosas como hermano usted está tergiversando lo escrito en la Biblia y otras cosas, al final te dicen que ellos tienen la interpretación correcta de la misma por el hecho de ser el líder del lugar, mi título, diploma, cargo de Pastor, ministro, sacerdote, reverendo, obispo, me respalda, Dios dirige su Iglesia a través de sus líderes, tenemos la unción del espíritu Santo para el cargo que tenemos.

Si no aceptas su dichos (muchos de ellos son legalismos), doctrinas, tradiciones, formas de vestir, terminan llamándote, rebelde, insujeto, hereje, hasta blasfemo, y si no te corriges aplican castigos como quitarte de el ministerio que desarrollabas en la Iglesia según tus dones, te hacen la ley de hielo, te maltratan espiritualmente haciéndote menos y bombardeándote desde el púlpito señalándote directa o indirectamente tus errores.
El abuso llega a tal grado que terminan expulsándote de la congregación y si no simplemente con su "maltrato santo" esperan con te salgas voluntariamente.

Jeremías 23:1 ¡Ay de los pastores que destruyen y dispersan las ovejas de mi rebaño! dice Jehová.
Jeremías 23:2 Por tanto, así ha dicho Jehová Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros dispersasteis mis ovejas, y las espantasteis, y no las habéis cuidado. He aquí que yo castigo la maldad de vuestras obras, dice Jehová.
Jeremías 23:3 Y yo mismo recogeré el remanente de mis ovejas de todas las tierras adonde las eché, y las haré volver a sus moradas; y crecerán y se multiplicarán.
Jeremías 23:4 Y pondré sobre ellas pastores que las apacienten; y no temerán más, ni se amedrentarán, ni serán menoscabadas, dice Jehová.
Sofonías 3:13 El remanente de Israel no hará injusticia ni dirá mentira, ni en boca de ellos se hallará lengua engañosa; porque ellos serán apacentados, y dormirán, y no habrá quien los atemorice.

Amonestación para los pastores y esperanza para las ovejas maltratadas:
Ezequiel 34:1 Vino a mí palabra de Jehová, diciendo:
Ezequiel 34:2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños?
Ezequiel 34:3 Coméis la grosura, y os vestís de la lana; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas.
Ezequiel 34:4 No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia.
Ezequiel 34:5 Y andan errantes por falta de pastor, y son presa de todas las fieras del campo, y se han dispersado.
Ezequiel 34:6 Anduvieron perdidas mis ovejas por todos los montes, y en todo collado alto; y en toda la faz de la tierra fueron esparcidas mis ovejas, y no hubo quien las buscase, ni quien preguntase por ellas.
Ezequiel 34:7 Por tanto, pastores, oíd palabra de Jehová:
Ezequiel 34:8 Vivo yo, ha dicho Jehová el Señor, que por cuanto mi rebaño fue para ser robado, y mis ovejas fueron para ser presa de todas las fieras del campo, sin pastor; ni mis pastores buscaron mis ovejas, sino que los pastores se apacentaron a sí mismos, y no apacentaron mis ovejas;
Ezequiel 34:9 por tanto, oh pastores, oíd palabra de Jehová.
Ezequiel 34:10 Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo estoy contra los pastores; y demandaré mis ovejas de su mano, y les haré dejar de apacentar las ovejas; ni los pastores se apacentarán más a sí mismos, pues yo libraré mis ovejas de sus bocas, y no les serán más por comida.
Ezequiel 34:11 Porque así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré.
Ezequiel 34:12 Como reconoce su rebaño el pastor el día que está en medio de sus ovejas esparcidas, así reconoceré mis ovejas, y las libraré de todos los lugares en que fueron esparcidas el día del nublado y de la oscuridad.
Ezequiel 34:13 Y yo las sacaré de los pueblos, y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia tierra, y las apacentaré en los montes de Israel, por las riberas, y en todos los lugares habitados del país.
Ezequiel 34:14 En buenos pastos las apacentaré, y en los altos montes de Israel estará su aprisco; allí dormirán en buen redil, y en pastos suculentos serán apacentadas sobre los montes de Israel.
Ezequiel 34:15 Yo apacentaré mis ovejas, y yo les daré aprisco, dice Jehová el Señor.
Ezequiel 34:16 Yo buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré; las apacentaré con justicia.
Ezequiel 34:17 Mas en cuanto a vosotras, ovejas mías, así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo juzgo entre oveja y oveja, entre carneros y machos cabríos.
Ezequiel 34:18 ¿Os es poco que comáis los buenos pastos, sino que también holláis con vuestros pies lo que de vuestros pastos queda; y que bebiendo las aguas claras, enturbiáis además con vuestros pies las que quedan?
Ezequiel 34:19 Y mis ovejas comen lo hollado de vuestros pies, y beben lo que con vuestros pies habéis enturbiado.
Ezequiel 34:20 Por tanto, así les dice Jehová el Señor: He aquí yo, yo juzgaré entre la oveja engordada y la oveja flaca,
Ezequiel 34:21 por cuanto empujasteis con el costado y con el hombro, y acorneasteis con vuestros cuernos a todas las débiles, hasta que las echasteis y las dispersasteis.
Ezequiel 34:22 Yo salvaré a mis ovejas, y nunca más serán para rapiña; y juzgaré entre oveja y oveja.
Ezequiel 34:23 Y levantaré sobre ellas a un pastor, y él las apacentará; a mi siervo David, él las apacentará, y él les será por pastor.
Ezequiel 34:24 Yo Jehová les seré por Dios, y mi siervo David príncipe en medio de ellos. Yo Jehová he hablado.
Ezequiel 34:25 Y estableceré con ellos pacto de paz, y quitaré de la tierra las fieras; y habitarán en el desierto con seguridad, y dormirán en los bosques.
Ezequiel 34:26 Y daré bendición a ellas y a los alrededores de mi collado, y haré descender la lluvia en su tiempo; lluvias de bendición serán.
Ezequiel 34:27 Y el árbol del campo dará su fruto, y la tierra dará su fruto, y estarán sobre su tierra con seguridad; y sabrán que yo soy Jehová, cuando rompa las coyundas de su yugo, y los libre de mano de los que se sirven de ellos.
Ezequiel 34:28 No serán más por despojo de las naciones, ni las fieras de la tierra las devorarán; sino que habitarán con seguridad, y no habrá quien las espante.
Ezequiel 34:29 Y levantaré para ellos una planta de renombre, y no serán ya más consumidos de hambre en la tierra, ni ya más serán avergonzados por las naciones.
Ezequiel 34:30 Y sabrán que yo Jehová su Dios estoy con ellos, y ellos son mi pueblo, la casa de Israel, dice Jehová el Señor.
Ezequiel 34:31 Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi pasto, hombres sois, y yo vuestro Dios, dice Jehová el Señor.

EL ARMAGEDON SEGUN LA BIBLIA

Aunque últimamente se ha estado utilizando el término Armagedón para referirse a una conflagración nuclear a escala mundial, la Enciclopedia Hispánica lo define así: “Lugar donde se congregarán las fuerzas del bien y del mal para librar la batalla final del gran día de Dios todopoderoso”. ¿Vencerá finalmente el bien sobre el mal, o es esa batalla una simple fantasía?

La intervención de Dios en los asuntos humanos recibe el nombre de Armagedón

Resulta consolador saber que la Biblia menciona repetidas veces el fin de la iniquidad, es decir, la maldad. Por ejemplo, en el libro de los Salmos dice: “Los pecadores serán acabados de sobre la tierra; y en cuanto a los inicuos, ya no serán” (Salmo 104:35). Y en el de Proverbios añade: “Los rectos son los que residirán en la tierra, y los exentos de culpa son los que quedarán en ella. En cuanto a los inicuos, serán cortados de la mismísima tierra; y en cuanto a los traicioneros, serán arrancados de ella” (Proverbios 2:21, 22).

La Biblia también explica con claridad que los malvados no renunciarán a su poder por las buenas; de ahí la necesidad de un acto contundente por parte de Dios que ponga fin a todo lo malo, incluidas las guerras (Salmo 2:2). Como veremos a continuación, el nombre que la Biblia da a este conflicto sin igual —Armagedón— es de particular interés.

Batallas que se libraron cerca de Meguidó

La palabra Armagedón se deriva de un término que significa “montaña de Meguidó”, y tanto la ciudad de Meguidó como la llanura que desde allí se dominaba —la llanura (o valle) de Jezreel— tienen una larga historia de batallas decisivas. En su libro The Battles of Armageddon (Las batallas de Armagedón), el historiador Eric H. Cline escribe: “A lo largo de la historia, Meguidó y el valle de Jezreel han sido la zona cero de batallas que determinaron el mismísimo curso de la civilización”.

Como indica dicho historiador, muchas de las batallas que se libraron cerca de Meguidó fueron de gran trascendencia. Los ejércitos mongoles, que invadieron gran parte de Asia en el siglo XIII, sufrieron su primera derrota en el valle de Jezreel. Durante la primera guerra mundial, las fuerzas británicas bajo el general Edmund Allenby derrotaron a los turcos en las cercanías de Meguidó. Un historiador militar dijo que la victoria de Allenby formó parte de “una de las más rápidas campañas decisivas” y constituyó “una de las batallas más decisivas de toda la historia”.

La Biblia también menciona batallas muy importantes que se pelearon cerca de Meguidó. Por ejemplo, el juez Barac conquistó a las fuerzas cananeas de Sísara en esa zona (Jueces 4:14-16; 5:19-21). Gedeón, con un pequeño ejército de 300 hombres, derrotó al enorme ejército madianita en las inmediaciones de Meguidó (Jueces 7:19-22). El rey Saúl y su hijo Jonatán murieron cerca del monte Guilboa, al este de la llanura de Jezreel, cuando las fuerzas filisteas vencieron al ejército israelita (1 Samuel 31:1-7).

El Armagedón según la Biblia

Aunque muchas de las guerras que se libraron cerca de Meguidó resultaron decisivas, ninguna logró eliminar la maldad. En ninguna de ellas se enfrentaron las fuerzas del bien y del mal en sentido absoluto. Lógicamente, esa clase de conflicto tiene que originarse de Dios, el máximo exponente del bien. Como dijo Jesús en cierta ocasión, “nadie es bueno, sino uno solo, Dios” (Lucas 18:19). Además, la Biblia dice específicamente que el Armagedón es la guerra de Dios.

El libro bíblico de Apocalipsis indica que “los reyes de toda la tierra habitada” serán reunidos “a la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” (Revelación 16:14). Después añade que los reunirán “en el lugar que en hebreo se llama Har–Magedón”, o Armagedón (Revelación 16:16). Un poco más adelante explica que “los reyes de la tierra” y “sus ejércitos” serán “reunidos para hacer la guerra contra el [jinete] y contra su ejército” (Revelación 19:19). Este jinete es el propio Jesucristo (1 Timoteo 6:14, 15; Revelación 19:11, 12, 16).

¿A qué conclusión nos llevan estos versículos? Queda bien claro que el Armagedón es una guerra entre Dios y la humanidad desobediente. ¿Por qué librarán Jehová y su Hijo, Jesucristo, semejante guerra? En parte, porque el Armagedón va a “causar la ruina de los que están arruinando la tierra” (Revelación 11:18). Además, dará paso a un mundo de paz, “una nueva tierra que esperamos según [la] promesa [de Dios]” y en la que “la justicia habrá de morar” (2 Pedro 3:1.